La Vida Ascendente es un movimiento eclesial de personas mayores, que quiere ser una respuesta a la llamada que Dios nos hace, a través de este signo de los tiempos, para compartir la Palabra de Dios.

También sirve para crecer en formación humana, cultural y espiritual, para que las personas mayores sean miembros activos de la sociedad y de la Iglesia; poniendo al servicio de los demás sus conocimientos, sus valores humanos, sus carismas y su fe; ayudándoles a descubrir su propia misión.

            Vida Ascendente ofrece un proyecto de vida que ayuda a dignificar el proceso de madurez y envejecimiento, a vivir con dignidad y sentido. Tenemos unos valores que dan sentido y esperanza a la vida. No podemos dejarnos arrastrar por el desánimo, el desencanto, la desilusión, la rutina, el aburrimiento, los miedos y el pesimismo.

            En la Vida Ascendente aprendemos que necesitamos a los otros, y que lo otros nos necesitan. La soledad, a veces, hace que nos sintamos abandonados, que nadie se fije, se compadezca o se preocupe de nosotros. Esa soledad que aísla, mata la esperanza, las ganas de vivir. Por eso el grupo “Vida Ascendente” quiere ser lugar de encuentro y lugar de servicio.

Desde hace 25 años la Vida Ascendente está funcionando en Puebla de Sanabria, animada por hermanas que han acompañado en este movimiento a muchas personas de esta Ciudad y pueblos limítrofes, llevando y fomentando el mensaje evangélico a los mayores para que puedan poner al servicio de este mensaje su caudal de fe, experiencia y tiempo.

También evangelizamos desde nuestro Carisma Amor de Dios, viviendo con el grupo los momentos congregacionales más significativos.

            Nuestras reuniones comienzan con una oración compartida. A continuación exposición del tema de Vida Ascendente donde se comparte la reflexión con experiencias personales, y se concluye con un compromiso.Y como no podía ser de otra forma, amenizamos la reunión con cantos, chistes y en ocasiones con una merienda.

Dedicamos nuestra tarea pastoral, también a los ancianos, pues muchos viven solos. Descubrimos cómo agradecen poder compartir con otras personas mayores sus preocupaciones, sus inquietudes, sus problemas familiares, sus enfermedades y dolencias… así se crean lazos de amistad concreta y cercanía que tanto necesitan.

Un compromiso que ha surgido del grupo, es la ORACIÓN que cada 15 días hacemos en la parroquia invitando a todas las personas que deseen participar.

También hemos participado en los ENCUENTROS que organiza el Movimiento Vida Ascendente a nivel Provincial y Regional, que siempre ayudan a descubrir la vivencia de otros grupos.

                                                                                 La Comunidad.